REFLEXIÓN FINAL
“SIN EXCUSAS PARA ACABAR CON LA
DISCRIMINACIÓN”
Me gustaría en este espacio final de reflexión, que propone
el último reto de este curso sobre igualdad de trato y no discriminación,
aportar mi experiencia en el ámbito de prisiones, partiendo de mi situación
profesional, y tras haberme enriquecido con la experiencia de la materia
abordada.
El penitenciario es un medio en el que hay muchos mecanismos
y muchas actitudes estereotípicas donde muchas veces se buscan excusas para no
conseguir cambios que son vistos como problemáticos.
En mi opinión personal, no hay excusas para impulsar, para
emprender pequeños cambios que permitan nada más y nada menos que evitar
discriminaciones que se producen por inacción o por tradición, o simplemente
porque es más cómodo no esforzarse en transformar nuestra realidad.
Desde mi experiencia personal, en un ámbito como el
penitenciario, falta formación y ganas para tratar con la diversidad. Podemos
seguir las dinámicas establecidas o ser proactivos. En mi caso, ante los retos
detectados, establecimos contacto con el servicio público de atención al
colectivo LGTBI dependiente de la administración autonómica, los introdujimos
en el Centro Penitenciario y conseguimos una mejor atención a la diversidad,
así como poco a poco influir en las dinámicas prestablecidas. A día de hoy
trato de replicar la experiencia en mi nuevo centro. No hay excusa para acabar
con la discriminación y dar una mejor atención a la diversidad. El cambio
empieza por cada uno de nosotros.
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